
Tener unas vacaciones en Vietnam es una de las experiencias que no vamos a olvidar en nuestra vida. Vietnam lleva tiempo convertido en uno de los destinos más populares del Sudeste Asiático y solo basta con poner un pie para comprender por qué.
Aunque muchos turistas se preguntan si viajar a Vietnam o Tailandia, este primer país es el preferido por aquellos que buscan patrimonio, cultura y naturaleza. Vietnam se ha construido sobre su propio exotismo, con unas características únicas en el que caen tanto la cultura de sus vecinos como su propia idiosincrasia.
Vietnam es, por tanto, un lugar que te acoge y te sorprende a cada paso. Budismo, confucionismo e incluso taoísmo e hinduismo siguen vivos entre puestos de comida callejera, tuk tuks, montañas, arrozales y cuevas. Espiritualidad, una gastronomía única y un bullicio que pondrá a prueba tu paciencia.
Pero vayamos un paso más allá y hablemos de los pasos a seguir para disfrutar de unas vacaciones en Vietnam de las que nunca se olvidan.
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Trazar una ruta inteligente

La primera clave para unas vacaciones en Vietnam es trazar una ruta inteligente. No es lo mismo buscar qué visitar en 21 días en Vietnam que ir solo una o dos semanas. Tampoco es lo mismo una primera visita al país que la segunda o la tercera, cuando probablemente se busquen experiencias o lugares distintos que los imprescindibles.
Para una primera visita al país hay dos lugares principales que todo viajero quiere ver. El primero es Hanoi, la capital de Vietnam y el segundo es la Bahía de Halong, a unas horas al norte de Hanoi. Entre ellos, son habituales las excursiones a Ninh Binh y Tam Coc.
Por último, una visita a Hue la ciudad prohibida de Vietnam y a Hoi An, la Venecia vietnamita suele ser la última parte de este viaje de imprescindibles.
En los casos en los que cabe una visita más o estamos ante un segundo acercamiento, se incluye la zona de Sapa. Esta zona montañosa llena de arrozales del norte está algo más alejada y peor comunicada que el resto pero su diversidad cultural y paisajes hace que cada vez más viajeros quieran incluirla.
Uniéndolos por zonas veríamos cuatro zonas diferenciadas: Hanoi-Ning Binh como punto de partida, Bahía de Halong y Sapa en el norte y Hoi An y Hue en el centro, donde también podríamos incorporar la ciudad de Danang.
Para un segundo viaje o si queremos algo más diferente o tenemos al menos un mes, añadiríamos la zona sur de Vietnam. Desde Ho Chi Minh, la ciudad más poblada de Vietnam hasta el Delta del Mekong o alguna de sus islas paradisíacas.
Más información: Mapa turístico de Vietnam
Mejor época para viajar a Vietnam

También hay que responder a la pregunta de cuándo ir a Vietnam para tener el mejor viaje posible. Esto nos ayudará a cerrar la ruta y tener el clima a nuestro favor. Antes que nada hay que señalar que Vietnam es un país lluvioso. Esto significa que incluso en la temporada seca puede que nos llueva alguna vez. Por ello, el chubasquero es imprescindible todo el año.
Sin embargo, si queremos que nos llueva lo menos posible tenemos que hablar por lugares. En general, la temporada seca corresponde con el invierno. Esto lo convierte en la mejor época para ir a Vietnam, especialmente a la zona más imprescindible: Hanoi, Bahía de Halong, Ninh Binh y Sapa.
En la zona central, por el contrario, la mejor época se retrasa un poco, correspondiendo con el final del invierno, la primavera y el principio del verano. Para visitar Hue u Hoi An lo más recomendable es ir de febrero a agosto. De septiembre a enero podemos encontrarnos algún monzón.
El sur, por su parte, tiene un clima más tropical, con lluvias más constantes durante todo el año, especialmente en el Delta del Mekong. Allí, la mejor época es el invierno, de diciembre a marzo, lo mismo que ocurre en Ho Chi Minh.
Curiosamente, estas épocas no corresponden con la temporada alta. La temporada alta en Vietnam para los viajeros europeos es el verano (mejor época para ver Hue y Hoi An), mientras que el invierno es el momento preferido para los chinos y otros turistas asiáticos, incluyendo el turismo interno.
Las temperaturas son agradables durante todo el año, pero durante el verano la humedad puede dar una sensación de calor asfixiante. En invierno podremos necesitar algo de abrigo, especialmente en la zona montañosa de Sapa donde incluso nos vendría bien tener un chaquetón.
Escapar unos días a la playa

No es un destino tan habitual, pero si tenemos tiempo nada como pasar unos días en las playas de Vietnam. Normalmente habrá una zona con playas que si visitarás, sea cuál sea tu destino y son las playas del norte del país en el área de la Bahía de Halong.
Este lugar, una de las 7 maravillas naturales del mundo, cuenta con pequeñas playitas de arena blanca en las que puedes desembarcar si haces un crucero por el área. Sin embargo, no es exactamente lo que diríamos un día de playa sino más bien un poco de aventura con playa incorporada.
En esta zona Ban Tran, Titop y la playa de Ba Trai Dao son las mejores opciones.
Para añadir unos días de descanso en la playa al final del viaje hay diferentes opciones. La más cómoda es añadirlo en la zona de Hoi An o Danang, en el centro del país. Estas ciudades están dentro del circuito turístico habitual dentro de lo que ver en Vietnam en dos semanas, y, alargando unos días, podemos descansar en algunos de sus resorts.
En esta zona destaca la playa de Non Nuoc, también conocida como China Beach. Muy cerca se sitúa también la playa de Mhy Ké, ideal para amantes del surf.
Alejándonos un poco hacia el sur tenemos la llamada Riviera vietnamita, con playas como la de Nha Trang. Una zona perfecta para descansar en un resort. Aun más al sur también es interesante la playa de Mui Ne.
Sin embargo, si queremos algo realmente especial, en lo que nos tenemos que fijar son en sus islas paradisíacas. Es complicado llegar, pero una vez allí te sentirás en el paraíso. Desde el sur del país podemos ir a Phu Quot, Con Dao o Nam Du.
¿Qué ropa llevar a Vietnam?

La ropa también es importante cuándo pensamos en unas vacaciones en Vietnam. Como hemos comentado en el apartado de mejor época, las temperaturas son agradables durante todo el año. Las máximas se sitúan alrededor de los 30 grados, 20 en invierno en la zona de Hanoi y las mínimas no bajan de 15 grados, con excepción de Sapa, donde se puede bajar en enero de los 10 grados.
En la zona del sur de Vietnam hace calor durante todo el año, por lo que si nuestro viaje es únicamente por esa zona no necesitaremos ni siquiera una manga larga, con llevar mangas cortas será suficiente.
Lo que si necesitaremos será un gorro, que podemos comprar fácilmente en el mismo Vietnam a muy buen precio y un chubasquero, que lo mismo, por si tenemos algún día de lluvia. Para el sol, la crema solar también es imprescindible.
Por otra parte, llevar calzado cómodo con el que poder estar todo el día es indispensable. En cualquier viaje a Vietnam se camina mucho y si hacemos alguna excursión en la naturaleza o nos montamos en algún barco lo agradeceremos. Igualmente, debido a la humedad, es mejor que el calzado no resbale.
El precio tan bajo de la ropa en Vietnam hace que no haya que preocuparse en exceso a la hora de hacer la maleta. Si necesitamos más calcetines, algo de abrigo o cualquier otra prenda, podemos comprarlo cuando estemos en Hanoi o en alguna de las ciudades. Si es importante llevar suficientes prendas de repuesto para las excursiones de naturaleza, ya que allí no será tan fácil encontrar tiendas donde adquirir este tipo de productos.
Tener paciencia ante los imprevistos

No menos importante es tener paciencia ante los imprevistos. En Vietnam, como en todo el Sudeste Asiático, las cosas van a otro ritmo. Por ello, si de verdad quieres disfrutar de tus vacaciones en Vietnam te recomendamos dejarte llevar.
Especialmente en grandes ciudades como Hanoi o Ho Chi Minh el tráfico es increíble y los atascos son habituales. Hay algunos trucos para poder salvarlos como hacer recorridos en tuktuks, pero no siempre será una opción disponible, por ejemplo si viajamos con las maletas y tenemos que coger un taxi.
Igualmente se pueden producir retrasos en los autobuses o en los barcos que vayamos a coger. Hay que ir con una mentalidad abierta, sabiendo de antemano que no estamos en el norte de Europa o Japón y que esto también es parte de la experiencia de viajar a Vietnam.
Si queremos puntualidad británica y nada de caos, es mejor elegir otro destino y no el Sudeste Asiático. Sin embargo, si nos atrevemos a viajar a Vietnam, puedes estar seguro de que no te vas a arrepentir. Si de verdad te dejas llevar y te adentras en su forma de ver el mundo y disfrutar cada momento, volverás a casa con una perspectiva totalmente diferente.